China es un país que guarda centenares de tesoros naturales. Nuestro destino de hoy es uno de esos tesoros al que, además, le acompaña una leyenda mágica. El Bosque de Piedra de Shilin, situado en la provincia de Yunnan, con pasos fronterizos con Laos, el Tibet, Birmania y Vietnam, es una inmensa y extraña agrupación de rocas kársticas que forman un auténtico bosque de piedra.
Las rocas kársticas se van formando a lo largo de los años a causa de la erosión de aguas ácidas. En el caso de Shilin, la masa de roca caliza fue disolviéndose a a causa del discurrir y el estancamiento de las aguas creando caprichosas formas y contornos en las que el viento también intervino.
Estas rocas, con más de 270 millones de años, ocupan una vasta área de 30.000 hectáreas —con diferentes niveles de concentración y tamaño—; algunos de sus afilados pináculos alcanzan los 30m de altura y presenta grutas, gargantas, lagos y cuevas propios de los más surrealistas paisajes kársticos.
Garganta del Bosque de Piedra de Shilin
El recorrido por las zonas más interesantes del parque dura unas 2h y se pueden ver rocas con formas reconocibles como ‘El elefante’, ‘La tortuga de cien años’ o la famosa ‘Ashima’. Todo unlaberinto de sorpresas y leyendas talladas en la piedra, Patrimonio de la Humanidad por laUNESCO desde 2007.
El elefante
La leyenda de Ashima
Por su belleza y misterio el Bosque de Piedra se ha convertido en uno de los reclamos turísticos más importantes de la región y atrae cada año a miles de turistas. Sin embargo, tanto el Bosque como la región que rodea a Kunming (capital de Yunnan) se hicieron célebres gracias al estreno en los años 60 de la película Ashima, basada en una leyenda popular del pueblo Sani, pertenecientes a la etnia Yi.
Cartel de la película ‘Ashima’ (1963), con el Bosque de Piedra al fondo
Según cuenta la historia, la doncella Ashima fue raptada por un tirano terrateniente que quería casarse con ella. Pero Ahei, su verdadero amor, acudió en su ayuda y para rescatarla luchó durante 3 días y 3 noches con el secuestrador logrando la victoria. Los amantes retoman el camino de vuelta, pero durante una fatal inundación Ashima fallece transformándose en una bella y misteriosa roca. Se cree que la roca de Ashima (que guarda parecido con una joven con el típico gorro Sani y un cesto a la espalda) permanece erguida en medio del Bosque de Piedra, mirando al horizonte, para proteger a su pueblo.
Ashima, vestida típicamente
La leyenda de Ashima simboliza para el pueblo Sani la esperanza y el deseo de una vida llena de plenitud y felicidad. Los comunistas la interpretaron como símbolo de la resistencia de las gentes humildes del pueblo Yi contra los ricos lugartenientes. Actualmente, cada mes numerosos miembros de la comunidad Sani rinden homenaje a su heroína Ashima.
La roca de Ashima, o la heroína mirando al horizonte
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