10 rincones que no debes perderte en Lisboa.

Lisboa es una ciudad preciosa y estos son sólo algunos de los lugares más recomendados por los viajeros. Si eres de esos afortunados que simplemente te apetece ir a Lisboa, te presentamos estos 10 rincones que no te puedes perder en la ciudad.

• 1
  Puente 25 de abril
  SILVIA GATTUSO
  Anteriormente llamado Salazar, pasó a llamarse así por la Revolución de los Claveles, el 25 de abril de 1974. El puente, que es uno de los más importantes iconos de la capital portuguesa, guarda muchas semejanzas con el Golden Gate de San Francisco y es que, de hecho, ambos fueron construidos por la misma empresa. El larguísimo puente de acero cuenta con dos niveles, uno inferior para trenes y el superior para coches.
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• 2
  Monasterio de los Jerónimos
  MARÍA ALBA
  Con más de 500 años de antigüedad y a caballo entre el gótico y el renacimiento, este monasterio de estilo manuelino impresiona tanto por dentro como por fuera. Símbolo de la época de los descubrimientos, como todo el barrio de Belém, alberga en él la tumba de Vasco de Gama, así como la del poeta Luís de Camões.
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• 3
  Barrio de la Alfama
  ANTOINE
  El Barrio de la Alfama es uno de esos lugares para perderse entre sus calles. Si quieres conocer el lado más auténtico de Lisboa, recorrer los callejones de este barrio, cercano al Barrio Alto, es una obligación. Ponte un calzado cómodo y patéate sus calles, en las que encontrarás cafés por medio euro, ropa tendida, azulejos, un precioso empedrado, interminables cuestas, tranvías, callejones…
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• 4
  Torre de Belém
  CRISTINA GALLEGO
  Otra de las joyas del Barrio de Belém es su Torre, de obligada visita tanto de día como de noche y, en especial, durante el atardecer. La Torre de Belém, a orillas del río, sirvió en su día como centro de recaudación de impuestos. Hoy, se puede visitar por dentro y recorrerla de arriba abajo, teniendo desde lo alto una de las vistas más bonitas del paso del Tajo por la capital portuguesa.
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• 5
  Ascensor de Santa Justa
  ANA MATAIX
  Lisboa no sólo se asemeja a San Francisco por su puente, sus cuestas y sus tranvías… También tiene algo del estilo parisino en este ascensor, obra de un discípulo del arquitecto francés Gustave Eiffel. Este ascensor, que en 1902 funcionaba con vapor, conecta el Barrio Bajo con el Barrio Alto y es, en sí mismo, una obra de arte. Las vistas desde arriba son increíbles.
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• 6
  Plaza del Comercio
  ALBERTO OLAYA
  Esta preciosa plaza lisboeta es la más famosa de toda la ciudad. Construida en el mismo sitio en el que se encontraba el Palacio Real antes de su destrucción en el terremoto de 1755, la amplísima Plaza del Comercio es hoy centro de reunión de locales y visitantes. La plaza es muy peculiar, ya que uno de sus lados está abierto al río Tajo, algo no muy común en este tipo de plazas, casi siempre cerradas por sus cuatro costados.
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• 7
  Pastelería de Belém
  CARLOS MILLÁN
  La Pastelería de Belém es uno de esos rincones que no se pueden dejar de visitar si vas a Lisboa. Hogar de los archiconocidos Pastéis de Belém, lleva funcionando desde el año 1837. Al día se elaboran unas 10.000 tortitas de crema y la receta es absolutamente secreta. De hecho, se preparan en la llamada "Oficina del Secreto", y es en este misterio en el que reside parte de su éxito. Delicioso, maestro.
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• 8
  Casa dos Bicos
  ALMUDENA
  Este palacete es símbolo del pasado glorioso de Lisboa durante la época de los descubrimientos. Llama especialmente la atención su fachada, repleta de piedras con forma de pirámides o puntas de diamante, una herencia artística del período del Renacimiento italiano. Gravemente dañado por el terremoto de 1755, el edificio ha sido restaurado y hoy vuelve a su esplendor.
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• 9
  El tranvía 28
  MIGUEL ÁNGEL PALMA
  La línea 28 del tranvía lisboeta es todo un clásico de la capital. El recorrido que hace este tranvía tiene un especial encanto, ya que recorre algunas de las calles más empinadas de la ciudad a lo largo de ocho kilómetros. Desde el Barrio Alto al Castillo de San Jorge, pasando por el Barrio de la Alfama o la Catedral de Lisboa, este tranvía es de los más utilizados de la ciudad.
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• 10
  Monumento a los Descubridores
  FELIPE CUERVO
  Este imponente monumento es precioso desde todos sus ángulos, y es que cualquiera que lo viese desde distintos ángulos podría pensar que no se trata del mismo lugar. A sus pies se encuentra una enorme rosa de los vientos de 50 metros de diámetro, un regalo de Sudáfrica en el que se muestran todos los descubrimientos portugueses a lo largo y ancho del mundo. Un auténtico regalo para el fotógrafo, que querrá pasar un buen rato disfrutando de todo el juego que tiene este rincón.
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