sábado, 14 de mayo de 2016

La mezquita de Sheikh Zayed, Abu Dhabi.

La espectacular mezquita de Sheikh Zayed

La espectacular mezquita de Sheikh Zayed

En Abu Dhabi, todo es a lo grande, todo pretende impactar por su riqueza o por su tamaño. No podía ser menos la mezquita de Sheikh Zayed, un gigantesco templo que es hoy en día la mezquita más grande de los Emiratos Árabes Unidos, y la tercera en tamaño de todo el mundo.

La mezquita Sheikh Zayed o la Gran Mezquita

La denominación oficial es la de Sheikh Zayed, cuyo nombre hace alusión a Zayed ibn Sultán Al Nahayan, el primer presidente que tuvieron los Emiratos Árabes Unidos. Y es que en realidad él fue quién promovió su construcción en el año 1998.
Sin embargo, dadas las dimensiones del proyecto, no la pudo ver acabada, ya que falleció en 2004, mientras que las obras en la mezquita no se concluyeron hasta 2007.
Detalle de la mezquita de Sheikh Zayed

Y aun así nos pueden parecer pocos años los invertidos en una construcción semejante, teniendo en cuenta que tuvo un presupuesto que de centenares de millones de dólares y su tamaño alcanza los 20.000 metros cuadrados.
Aunque se pueden dar otros muchos datos que reflejan la grandiosidad del lugar, ya que posee, por ejemplo, más de 1.000 columnas o tiene un total de 82 cúpulas y bóvedas.

La modernidad de la mezquita de Sheikh Zayed

Obviamente, una construcción de este tamaño, comenzada en los últimos años del siglo XX y concluida en el XXI, no podía ser edificada siguiendo los procesos antiguos, aunque su aspecto definitivo lo cierto es que es absolutamente tradicional.
Mezquita de Sheikh Zayed

Para su construcción se utilizó la más alta tecnología, ya que no había límite alguno de presupuesto. Un buen ejemplo de ello, es que esta mastodóntica construcción está alzada sobre 6.000 pilares de acero hundidos hasta casi 30 metros bajo la superficie. Mientras que todo el templo se eleva 9 metros sobre el nivel del suelo. Hay que imaginarse la de millones de toneladas de tierra que se movieron.

Más ejemplos de la modernidad de la mezquita de Sheikh Zayed  es que, pese a que todo parece construido en mármol, en realidad se usaron hasta 28 tipos de rocas calizas diferentes, cada una adecuada a cada parte del templo.
Y no solo materiales naturales pétreos, también se usaron otros mucho más contemporáneos. Por ejemplo, las cúpulas más grandes se realizaron con piezas de hormigón prefabricado, mientras que las más pequeñas se hacían en la misma obra con moderna fibra de vidrio.

Lo más impactante de la mezquita de Sheikh Zayed

Mezquita de Sheikh Zayed

Arquitectónicamente hablando, los elementos más destacados de la mezquita de Sheikh Zayed son sus esbeltos minaretes, cuatro torres que alcanzan los 107 metros de altura. También llama la atención la cúpula principal y más elevada que, obviamente, cubre la gran sala de oración.
Si bien antes de llegar a ese espacio cubierto se hace necesario atravesar un grandioso patio abierto al aire libre y rodeado por elegantes arcos de herradura, donde todo el suelo son losas de mármol pulido con incrustaciones de colores.

El interior de la mezquita de Sheikh Zayed

Si el conjunto impresiona por su grandiosidad, al entrar a su interior la sorpresa se multiplica, por la absoluta opulencia decorativa. Es algo asombroso, el visitante casi no se puede creer lo que está viendo.
Interior de Sheikh Zayed

Por ejemplo, sobre sus cabezas se ven siete lámparas gigantescas de cristal de Swarovski. Para hacerse una idea basta decir que la mayor de ellas, pesa 9.000 kilos.
Si eso cuelga del techo, en el suelo que se pisa está la alfombra persa más grande jamás tejida en una sola pieza. Tiene 5.627 metros cuadrados, hay 2.200 millones de nudos, pesa 47 toneladas y ella trabajaron durante dos años unas 1.200 mujeres iraníes. Solo por contemplar esa alfombra puede valer la pena entrar aquí.
La visita es gratuita y tan solo tiene que ser respetuosa, ya que se vigila mucho el vestuario, especialmente de las mujeres. Sin duda, la espectacularidad de la mezquita de Sheikh Zayed asombrará, y cada uno podrá sacar sus propias conclusiones sobre este tipo de obras a golpe de petrodólares.

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